Todavía no tengo claro el por qué o cómo he llegado a ‘Bogdan Boner: Un exorcista de pena’, nueva producción de Netflix, cortesía de Polonia y con un estilo animado curioso, por decirlo de alguna forma. El caso es que algo me ha atraído de esta alocada propuesta, y una vez vistos sus episodios (de apenas once minutos cada uno, lo que es una maravilla), puedo confesar que es tal cual lo que parece, es decir, una serie animada para adultos, cargada de mala baba, sin límites de ningún tipo, y con una incorrección política que sabe a gloria.
La animación es la que es, ya que no hace falta dedicarse al oficio para saber que es poco menos que mediocre, notándose las ínfulas de parecerse a South Park (los movimientos de los personajes son la pista, hasta el punto de que estoy seguro de que han usado la misma técnica), aunque siendo más bien la versión de Hacendado. Ojo, no me cabe duda de que está hecha así adrede, y es más, le queda genial al tono de la serie, ya que todo es una locura indescriptible.
Porque sí, la historia es demencial, siendo una parodia de exorcismos y posesiones con unos desternillantes personajes (que se llevan el premio del año a la estupidez), unos diálogos que nos hacen cuestionarnos el sentido de la vida, y una oda al alcoholismo que nadie vio venir. Y no, no estoy de broma, siendo obvio que al creador y guionista de la serie le gusta beber, pero no sabéis hasta qué punto, ya que el tema sale a relucir casi cada dos frases. Existe la obsesión, y luego lo que aquí acontece.
Y es que no creo que nadie estuviese preparado para una serie como ‘Bogdan Boner‘, siendo sorprendente que haya aterrizado en Netflix, porque no es apta para todos los paladares. Yo la he disfrutado, porque es tan rara que atrapa, además de comprar su espíritu transgresor y de ser muy fan de la incorrección política (y más en los tiempos que corren), aunque no estoy tan desquiciado como para recomendar algo semejante a nadie. Pero eh, si aceptas las reglas del juego, eres fan de South Park (salvando mucho las distancias) y te da igual todo, aparte de estar al borde de la psicopatía, seguramente encuentres oro puro en esta serie. En caso contrario… huye… ¡Huye! En cuanto al resto, a disfrutar, que rarezas y experimentos imposibles como el que nos ocupa no aparecen todos los días. El mundo está muy loco, y ‘Bogdan Boner‘ es una prueba más de ello…
Crítica en vídeo:
Ocio World 
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