Hacía tiempo que quería leer una de las novelas de Esteban Navarro, antiguo agente de policía, el cual es un escritor bastante activo en Twitter, ya sea promocionando sus propias obras o comentando temas de actualidad. Pues bien, para comenzar con sus novelas, he apostado por Una Historia de Policías, thriller por el que fue expedientado (cosa que se encarga de recordar cada cierto tiempo) y que le ha generado no pocos problemas. Una vez leído, no me extraña en absoluto por la información que da, aunque jamás defendería lo que habrá tenido que padecer, siendo bastante increíble que hayan ido a por él por una trama de ficción, eso sí, quizás más realista de lo que le habría gustado a los cuerpos de seguridad del Estado. ¿Tendrán algo que ocultar?
Y es que estamos ante una minuciosa obra policiaca, donde se nota un mimo por los detalles, notándose la experiencia que tiene Navarro a sus espaldas, con una serie de información que seguramente no encontrarás en otras propuestas de la misma índole. Y creo que ése es el fuerte de la novela que nos ocupa, además de su mayor acierto, siendo un trabajo concienzudo y pulcro.
En cuanto a la historia, no juega a reinventar el género ni ofrece nada novedoso, siendo más de corte intimista, humilde y sin artificios de ningún tipo, ya que casi toda la acción sucede en una noche, con algunos saltos en el tiempo, los cuales Navarro sabe cuadrar a la perfección, sabiendo el lector en qué punto de la historia está en todo momento y sin el peligro de perderse en el submundo que nos presenta.
En cuanto a los personajes, están todos muy bien dibujados, siendo tipos algo detestables con los que es imposible empatizar, pero no por ello nos dejan de interesar sus tejemanejes. Curiosamente, quizás el que quede un poco por debajo del resto sea el protagonista y narrador de la historia, ya que los secundarios funcionan mejor y tienen más garra.
Y no podemos hablar del libro sin mencionar lo polémico del mismo, ya que sus protagonistas son cómplices de una serie de trapos sucios que son indescriptibles y que superan la barrera de la corrupción como la entendemos. Es tal el nivel de información, que es imposible no creerse lo que está contando el autor, dando bastante miedo que haya agentes de la ley semejantes en los cuerpos de policía. Y es que estamos ante una historia que podría suceder perfectamente en la realidad. Asusta… asusta mucho.
También alabar la valentía de Navarro al incluir instantes claramente políticamente incorrectos (y más en los tiempos que corren), además de lenguaje soez en no pocos momentos, siendo una novela cruda y realista, que no busca la floritura sino más bien la cercanía con cualquier tipo de lector, contándonos el lado oscuro de la ley, donde sus personajes principales son capaces de rebasar sus límites sin ningún tipo de tapujo. Lo dicho, valentía, y más viniendo de un ex-policía.
Desafortunadamente, su final abrupto y algo surrealista me ha dejado un sabor agridulce, siendo un desenlace que, al menos para quien esto escribe, no está a la altura del resto de la trama, mucho más satisfactoria. Dicen que un mal final puede arruinar una buena historia. No creo que sea el caso, pero sí impide que la lectura sea más redonda.
En conclusión, una historia simple y concisa, con un gran trabajo detrás, notándose la experiencia de Navarro en su anterior trabajo y que cumple con creces, al ser un thriller tan interesante como correcto, aunque el desenlace quizás pueda pecar de decepcionante. Muy recomendable si te gusta el género.
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