Hace unos años adquirí la Nintendo 3DS después de haberla deseado durante demasiado tiempo. Una vez en mis manos pude comprobar que, seguramente, fuese una de las mejores adquisiciones que he hecho a lo largo de mi vida. Y es que hablamos de una consola portátil con un atractivo y fabuloso catálogo, con infinidad de increíbles propuestas y que justifican la compra de la consola de Nintendo.
Tengo muchos juegos en mi estantería, pero si hay uno que me ha maravillado de esa horneada de juegos en 3D es, sin lugar a dudas, el Luigi’s Mansion 2. Después de disfrutar de esa estupenda entrega, quise jugar a la primera parte, pero como jamás tuve una Game Cube (que por lo que jugué en casa de amigos y se habló de ella, seguramente fuese la consola más decepcionante de la compañía) me quedé con las ganas.
Eso no se iba a repetir con su segunda entrega, por lo que lo adquirí y quedé maravillado por sus estupendos gráficos, su efectiva jugabilidad y por lo rabiosamente entretenido que acaba resultando, siendo uno de los juegos más divertidos que he tenido la suerte de jugar.
Es por eso que siempre me imaginé el imposible sueño de que algún día decidiesen traer la primera entrega como remake a la mencionada consola. Pues bien, parece ser que algunos sueños se cumplen (y que algún elfo debió escucharme…), ya que Nintendo decidió que era buena idea traer un remake a la portátil del clásico de 2001.
Yo lo adquirí en el momento de su salida, hace ya dos años, pero por falta de tiempo no ha sido hasta ahora que me he podido meter de lleno en faena, y si hay dos palabras que puedan definir a este lavado de cara del clásico protagonizada por el hermano en la sombra, son: ligera decepción.
Y es que el tema de los remakes es muy peliagudo, ya que últimamente se está abusando demasiado en la industria de los videojuegos, haciendo remakes de todos los clásicos habidos y por haber y entregando productos que no están a la altura de las circunstancias y por los que el paso del tiempo ha hecho estragos.
No creo que sea el caso del juego que nos ocupa, pero lo que es seguro es que es un hijo de otra época y que la segunda parte le deja en pañales sin pudor alguno. Quizás ése haya sido mi problema, el haber jugado a su estupenda secuela en primera instancia, ya que este primer Luigi’s Mansion me ha sabido a poco, dejándome un gusto agridulce y la sensación de que quizás se podrían haber mejorado ciertos aspectos.
Obviamente, como no he jugado al de Game Cube no voy a hacer comparaciones de ningún tipo, pero si de algo se quejaron en aquella versión fue de la duración, de apenas seis horas (o menos), siendo un factor clave que desde la compañía no han corregido, metiendo con calzador un par de recursos para intentar suplir ese defecto, pero sobra decir que estamos ante un juego corto… muy corto.
Nada que reprochar a los gráficos, ya que cumplen su cometido y se nota la mejoría respecto a hace unos años, aunque los de la secuela son muy superiores, notándose que no han puesto esmero en este apartado, siendo una conversión algo perezosa, aunque nada que lamentar especialmente.
La jugabilidad tiene aciertos, ya que es muy divertido atrapar fantasmas, pero creo que hay movimientos muy toscos y confusos que hacen que la experiencia se tuerza un poco, siendo un juego que quizás se atragante en los más pequeños de la casa. Y no hablemos de ciertos malditos objetos que has de buscar…
El juego es entretenido, por supuesto, aunque hablar de la historia quizás sea un sinsentido, porque ésta prácticamente brilla por su ausencia, aunque, seamos sinceros, no es lo que se busca en un juego de estas características. Y sí, se agradece que el protagonista sea el infravalorado Luigi y Mario quede relegado a un segundo plano, ya que la variedad de personajes de la casa da para muchas distintas franquicias. Por cierto, ¿para cuándo otro Wario Land?
Mención especial a la estupenda banda sonora, que le viene genial al toque de terror (y humor) con sabor genuino a Halloween que adorna el juego. Se nota el cuidado en ese apartado, elevando la nota final.
Y si alguien se lo está preguntando (cosa que dudo) no he jugado todavía a la tercera parte, ya que es exclusiva de la Nintendo Switch (consola que no tengo), y mucho me temo que a estas alturas del cuento no van a hacer una versión para la 3DS, que ya se podría calificar como consola de la pasada generación. Pero es una asignatura pendiente, desde luego.
En conclusión, estamos ante un juego y remake que peca de corto y algo tosco en movimientos, y que se deja jugar como curiosidad, pero que quizás decepcione a los fans de la marca, al ser mucho más insustancial de lo esperado, estando a años luz de su segunda entrega y siendo una opción que no pasa de correcta.
No obstante, me alegro de haberlo jugado y no haberme quedado con la curiosidad, por lo que si te encuentras en este grupo, no es una mala compra. Menos es nada.
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