¡Vaya historia! – History 101 – Serie Netflix – Crítica – Una fascinante serie documental que aborda temas tan interesantes como necesarios

Recientemente ha llegado a Netflix (sin hacer ningún ruido, pero es que son demasiados estrenos semanales) una nueva serie documental de diez episodios, de escasos veinte minutos cada uno y donde se abordan asuntos tan interesantes y fascinantes como necesarios, siendo desde ya una propuesta imprescindible para los que queremos saber más sobre ciertos aspectos de la vida que es imposible obviar.

Y es que en la serie se abordan en sus diez capítulos temas como la comida rápida, el feminismo, el sida (este episodio en concreto da auténtico pánico, ya que hay demasiadas similitudes con cierta pandemia que está actualmente entre nosotros), el auge de China, la carrera espacial, el plástico (y su contaminación), el petróleo en Oriente Medio, los robots, la energía nuclear o la genética, siendo los cuatro primeros episodios los más logrados, aunque los otros seis tampoco se quedan atrás.

Todos los capítulos son brillantes (como ya digo, destacan los cuatro indicados), al abordar el asunto desde la inteligencia y el sentido común, siendo quizás poco recomendables para los espectadores más conservadores. Esta serie no es para ellos, desde luego.

Uno de los grandes logros de la serie es no haber asimilado los vicios de otras producciones similares (es decir, documentales de una hora cada episodio, exagerado a todas luces), al haber reducido su duración a diez episodios de apenas veinte minutos, siendo pequeños documentales frescos, entretenidos y que no se hacen pesados en ningún momento, gracias a sus potentes imágenes de archivo o a sus gráficas donde nos hacen increíbles comparaciones que sorprenderán a más de uno.

Por otro lado, considero que es una virtud plantear el debate (en cada episodio hay una pregunta inicial) y dejar que el espectador saque sus propias conclusiones, aparte de mostrar las dos caras de la moneda, ya que (casi) todo tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Estoy seguro que algunas personas mostrarán rechazo ante la ambigüedad de la propuesta, pero yo la entiendo a la perfección, ya que no todo es blanco o negro, y la serie te deja pensando, algo que no consigue cualquier producción. La verdad es que no me chirriaría nada que la pusieran en los colegios.

Es posible que seas una persona leída, culta o que directamente sepas de todo, pero si no es el caso (como un servidor) encontrarás una propuesta perfecta para adentrarte en problemas que todavía están a la orden del día y de los que pensábamos que ya lo sabíamos todo, cuando la serie nos confirma que no era así.

No sé si esta inteligente y adictiva producción va a tener el suficiente éxito para justificar una segunda temporada, pero no me importaría en absoluto, ya que consigue que temas que quizás no llamen la atención a priori, se conviertan en algo entretenido y que merece la pena ser visionado y escuchado.

En conclusión, una maravillosa propuesta, que aborda problemas y preguntas tan intrigantes como necesarios, y que es una estupenda opción si te gustan los documentales y quieres tener más datos sobre temas que nos tocan directamente como seres humanos. Una sorpresa más que recomendable.